Todos sabemos que el ser humano utiliza muy poco del cerebro: los que hablan del 5%, los que del 10%, porcentajes todos que demuestran que el poderosísimo ordenador que tenemos a nuestra disposición no está bien aprovechado. Un poco como comprar uno de última generación, con mucha ram y capacidad de procesamiento de datos, y usarlo como calculadora aritmética para sumar y restar…
En ese 90% (o 95%) de materia gris no expresada, hay áreas inexploradas por la ciencia, pero no por los acostumbrados a las disciplinas holísticas y ni siquiera por los psicólogos y psicoterapeutas, que saben que en los lugares más recónditos de la mente hay partes del yo que el ser humano no conoce. Piezas que esconden bloqueos inconscientes, miedos reprimidos, saberes latentes.
En ThetaHealing® , los niveles en los que uno trabaja para sondearse a sí mismo son cuatro y, entre estos, se encuentra el nivel subconsciente, mientras que los otros son el nivel genético, el histórico y el del alma.
Cuando tienes un miedo irracional, por ejemplo al vacío o a la altura, que no puedes asociar con un trauma bien presente, suele acechar en el inconsciente.
Cuando existen prejuicios hacia otras razas, religiones, hacia el otro sexo o diferentes culturas, que no tienen su origen en un trauma recordado, entonces estos también surgen del inconsciente, es decir, de hechos registrados cuando uno era muy joven, o heredado. del árbol genealógico o de vidas anteriores.
El inconsciente es un terreno maravilloso y fértil, pero a veces oscuro . Para que funcione a nuestro favor, y no en nuestra contra -es decir, iluminando las zonas sombreadas- podemos utilizar la poderosa herramienta de la excavación del ThetaHealing® comprender el origen de cualquier limitación cuya motivación no se entienda de inmediato, para eliminarla y reemplazarla con un pensamiento o creencia empoderadora.
Poco a poco, lo que estaba oculto y (de hecho) inconsciente comienza a revelarse, permitiéndonos acceder a áreas inexploradas de nuestro ser y entrar cada vez más en contacto con nuestra esencia más pura.
Debemos medirnos con el inconsciente en cada vida : si no le hacemos caso hoy, mañana nos lo pedirá proponiendo situaciones similares, hasta que un verdadero trabajo sobre nosotros permita ese desbloqueo, fundamental para continuar en un vida plena y, sobre todo, digna de ser vivida.
Si quieres saber más sobre cómo trabajar las creencias desempoderadoras que viven en tu inconsciente, contáctame y estaré encantada de hablar contigo.
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